Recientemente Corner Abogados ha realizado una reclamación a una compañía aérea nacional solicitando la indemnización que regula el Reglamento de Derechos de Pasajeros (CE) 261/2004 por un vuelo inferior a 1.500 kilómetros, el cual fue retrasado más de tres horas y posteriormente cancelado.
Las vías de las que dispone un afectado por una cancelación de un vuelo son:
- Reclamación a la compañía aérea.
- Reclamación a AESA
- Vía judicial.
El cliente realizó dos reclamaciones a la compañía aérea reclamando su derecho a ser indemnizado por cuantía de 250 € por persona, a lo que la compañía aérea contestó únicamente con un email presuntamente automatizado diciendo que en ocasiones la meteorología o las autorizaciones del control aéreo podrían haber causado este retraso, lo que supuso esperar dos meses.
Posteriormente interpusimos directamente la demanda ante el Juzgado de lo Mercantil, lo que sí que supuso que la compañía aérea se pusiera en contacto con nosotros y abonase rápidamente la indemnización para evitar así tener que ir a juicio, el cual tenían muchas opciones de perder, ya que en este caso estaba muy claro que la cancelación se debió a fallos técnicos.
La vía judicial es la definitiva y la que recomendamos utilizar, ya que es la única que puede obligar a la compañía aérea a abonar la indemnización, y utilizar las otras vías sólo supondrá, en la mayoría de los casos, una pérdida de tiempo y esfuerzos, siempre que el caso esté claro.
Las indemnizaciones a las compañías aéreas por retrasos o cancelaciones superiores a 3 horas son de 250 € para vuelos con distancia hasta 1.500km, 400 € para vuelos con distancia entre 1.500 y 3.500km o de más de 3.500km cuando fueren intracomunitarios, y de 600 € para distancias superiores a 3.500km. Aparte de ello también tienen la obligación de asistir a los pasajeros con comida, llamadas telefónicas y, en caso de que deba pernoctar una o varias noches, a un hotel.
Diariamente se producen muchísimas cancelaciones de vuelos de los que los afectados no reciben la indemnización que les corresponde por desconocimiento de sus derechos (a pesar de que la compañía tiene la obligación de informarles) o por pereza de tener que reclamar, más aún sabiendo que lo más probable es que si no acudes a la vía judicial no te abonen nada. Es por ello por lo que animamos a las personas que se vean afectadas por retrasos y cancelaciones a contactar con un abogado e informarse de sus derechos y de los trámites a seguir en estos casos.
Abogado